SALA DE LECTURA
BABEL recomienda (para acercarnos a la ciencia desde chicos):
"Viejos son los trapos - De arqueologÃa, ciudades y cosas que hay debajo de los pisos" de Daniel Schavelzon y Ana Igareta - Colección Ciencia que ladra... - SigloXXI Editores, Argentina 2007.
Cuchillos de hueso, restos de vacas o gatos en el patio de una escuela, chicos que hurgan en la basura de sus vecinas, botellas de cerveza enterradas... De estos y (muchos otros) elementos viven los arqueólogos, capaces de emocionarse por los hallazgos más inesperados en sus excavaciones.
"El elixir de la muerte - Y otras historias con venenos" de Raúl Alzogaray - Colección Ciencia que ladra... Siglo XXI Editores, Argentina,2007.
¿El famoso caso de las brujas de Salem se explica por una intoxicación con un hongo de pan? Muchas preguntas del reino de la toxicologÃa integran este trabajo que recorre la fascinante historia de los venenos desde la cicuta oficial de los antiguos griegos hasta el caso de envenamiento con polonio radiactivo de un espÃa ruso. Sin embargo las mismas sustancias nocivas han abierto puertas para la salud y el conocimiento.
"Viejos son los trapos - De arqueologÃa, ciudades y cosas que hay debajo de los pisos" de Daniel Schavelzon y Ana Igareta - Colección Ciencia que ladra... - SigloXXI Editores, Argentina 2007.
Cuchillos de hueso, restos de vacas o gatos en el patio de una escuela, chicos que hurgan en la basura de sus vecinas, botellas de cerveza enterradas... De estos y (muchos otros) elementos viven los arqueólogos, capaces de emocionarse por los hallazgos más inesperados en sus excavaciones.
"El elixir de la muerte - Y otras historias con venenos" de Raúl Alzogaray - Colección Ciencia que ladra... Siglo XXI Editores, Argentina,2007.
¿El famoso caso de las brujas de Salem se explica por una intoxicación con un hongo de pan? Muchas preguntas del reino de la toxicologÃa integran este trabajo que recorre la fascinante historia de los venenos desde la cicuta oficial de los antiguos griegos hasta el caso de envenamiento con polonio radiactivo de un espÃa ruso. Sin embargo las mismas sustancias nocivas han abierto puertas para la salud y el conocimiento.
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