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Mostrando entradas de mayo, 2020

María Elena walsh / Documental

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Documental sobre la vida y obra de la cantante y escritora argentina María Elena Walsh. SINOPSIS María Elena Walsh revolucionó para siempre el lenguaje y el imaginario de los espectáculos para niños. Pero muy pocos conocen la trascendencia de sus obras para adultos, sus convicciones políticas contra las dictaduras y su defensa por los derechos de las mujeres. Temas abordados por este trabajo que recorre  los principales conflictos vividos en su vida personal y profesional. Desde su adolescencia como  precoz poeta en una sociedad opresora, hasta sus últimos años, luego de abandonar  los escenarios durante el último gobierno militar.  Con un lenguaje cinematográfico, intimista y sensorial, los realizadores reconstruyen la vida  de la poeta a través de sus relatos autobiográficos, interpretados por Ingrid Pelicori y desde los testimonios  de su compañera, la fotógrafa Sara Facio, su amiga Susana Rinaldi y su biógrafo Sergio Pujol. R ealizado por Ernesto Ardito y Virna

Silvia Barei / Poemas

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Silvia Barei, poeta cordobesa, docente en la Universidad Nacional de Córdoba , investigadora. La verdad de la milanesa Primero hay que cortar prolijamente la carne. Luego batir dos o tres huevos y probar si quedan bien el ajo y el perejil. Después no perder la imaginación en la alameda o en el rostro del crepúsculo y v olver rápido al pan rallado sin asociar con la lluvia ni siquiera con las palabras del poeta: que "no ve que su melancolía vuelve la casa mucho más desierta". A esta altura el aceite repica demasiado. ¿Tiene rocío o son los ojos de esta mujer que arma milanesas mientras piensa que no es esto el proyecto para este sol de octubre que no es esto ni el canto ni el espejo? Deambula entre sartenes mientras piensa que sí es esto su derrota  y su canción de gesta. Del libro de poemas publicado junto a María Teresa Andruetto:  MUJERES, ARTES Y OFICIOS - EDITORIAL COMUNICARTE 2013 *****

Blancanieves y los siete enanos / Contámelo de nuevo

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Versión de Jacob y Wilhelm Grimm Érase una vez a mediados del invierno (1), cuando los copos de nieve caían como plumas del cielo, una reina se sentó en una ventana cosiendo, y el marco de la ventana estaba hecho de negro ébano. Y mientras cosía y miraba la nieve por la ventana, se pinchó el dedo con la aguja (2) y tres gotas de sangre cayeron sobre la nieve. Y el rojo parecía bonito sobre la blanca nieve, y pensó para sí misma: "Ojalá tuviera un hijo blanco como la nieve, rojo como la sangre y negro como el ébano (3) del marco de la ventana". Poco después tuvo una hija, blanca como la nieve y roja como la sangre, y su cabello negro como el ébano; y por eso se la llamó Blancanieves (4). Y cuando nació la niña, la reina murió. Después de un año, el Rey tomó otra esposa (5). Era una mujer hermosa, pero orgullosa y altiva, y no podía soportar que nadie más la superara en belleza. Tenía un maravilloso espejo (6), y se paraba frente a él. se miraba y decía: &q

Palabras (Fragmentos)

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Jesús Marchamalo Mónica Gutiérrez Serna Ed. Kalandraka 2013 Me gustan las palabras. Me gusta bajar por la mañana a comprarlas, y elegirlas una a una, como si fueran albaricoques maduros. Nunca se sabe qué palabras van a necesitarse a lo largo del día. Nunca se sabe cuáles sacar en mochila, o llevar en la maleta de viaje. Cuántos adjetivos –blanco, oloroso, fértil-, cuántos verbos y cómo conjugados: te quiero, conduzco, abriendo, he estado, supuse… Cuántos artículos indefinidos. Cuántas preposiciones. Yo digo que me gustan las palabras. Me gusta atesorarlas. Pero también dejarlas escapar, a veces, como si no fueran mías. ……………………………………………………………………………………………………….. Hay palabras que son como un regalo. Parecen compradas en una pastelería, un domingo de sol, por la mañana, y llevadas a casa en una bandeja, como pasteles recién horneados: mimoso, alféizar, calima. Con las palabras hacen los políticos promesas Eslóganes los publicistas. Acusaciones lo

El flautista de Hamelin / Contámelo de nuevo

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Había una vez una pequeña ciudad al norte de Alemania, llamada Hamelin. Su paisaje era placentero y su belleza era exaltada por las riberas de un río ancho y profundo que surcaba por allí. Y sus habitantes se enorgullecían de vivir en un lugar tan apacible y pintoresco. Pero... un día, la ciudad se vio atacada por una terrible plaga: ¡Hamelin estaba lleno de ratas! Había tantas y tantas que se atrevían a desafiar a los perros, perseguían a los gatos, sus enemigos de toda la vida; se subían a las cunas para morder a los niños allí dormidos y hasta robaban enteros los quesos de las despensas para luego comérselos, sin dejar una miguita. ¡Ah!, y además... Metían los hocicos en todas las comidas, husmeaban en los cucharones de los guisos que estaban preparando los cocineros, roían las ropas domingueras de la gente, practicaban agujeros en los costales de harina y en los barriles de sardinas saladas, y hasta pretendían trepas por las anchas faldas de las charlatanas mujeres reunida